John no quería comernos, quería que comiéramos...
De modo, que aun convertido en aquella bestia, el cerebro cuerdo de John, estaba en funcionamiento. Se comportaba como lo que era, pero podía notar que aquel "beast" era más humano que el anterior que vi.
Rápidamente, me acerqué a unos bidones, de los cuales rebosaba comida. Comí con tanta ansias que casi me atraganto en varias ocasiones. Fue un placer, sentir de nuevo comida cayendo en mi estómago. Me sentí reconfortado al instante, y fui notando como mis células, hambrientas, recibían las proteínas y demás cosas que les hacían falta, y que hacía ya tiempo no les daba. Alicia, también estaba hambrienta, supongo que menos que yo, pero me ayudó también, a vaciar los bidones. Comimos hasta reventar.
Entonces, de pronto, comenzó a sonar una alarma. Era evidente que, Mark, había sido el culpable, o cualquiera que nos hubiera visto huir. El caso es que, John se puso nervioso y rugió bastante fuerte. Se puso a golpear todo lo que había a su paso. Destrozó todos los sistemas de cámaras y varias habitaciones, las cuales componían la cabina de la torre, en la que nos encontrábamos.
-¡Joder, hay que irse de aquí, cuanto antes...! -dije mientras me introducía varios chorizos en el bolsillo-. ¡John! ¡Amigo! ¿Me escuchas? ¿ME ENTIENDES?
Le grité a voces, para que me escuchara por encima de los ruidos que él mismo estaba haciendo, convirtiéndolo todo en chatarra. De repente, paró y me miró con su ya habitual ruido al respirar rápidamente. Nos cruzamos la mirada durante un instante y le insistí preguntándole si me entendía. La alarma seguía inamovible, con un sonido penetrante en los oídos, que se hacía aun más molesto, entre más lo escuchabas.
Entonces fue cuando el "beast" calló al suelo precipitadamente, bollando la chapa por el peso. Comenzó a agitar todas sus extremidades, violentamente. Y ésta vez, en vez de aumentar el tamaño, lo disminuyó. Cuando quisimos darnos cuenta de lo que pasaba, el cuerpo de John ya era, de nuevo, humano. Pero parecía que la transformación en aquella cosa, le había dejado muy debilitado.
-¡John, estás bien! ¿Cómo te encuentras? -Alicia y yo, nos acercamos a él, mientras yo dije eso.
-¡Kevin! -dijo casi agonizando-, ¡...se llevaron mi cabeza...! ¡Yo ya no soy yo... soy un clon, experimentaron conmigo, cuando nací..., intentaron convertirme en un "beast" pero algo falló... se volvió inestable...! ¡Me percaté de que podía convertirme, en ésta bestia cuando quisiera e incluso después de la muerte...! ¡Me deshice de todos los que pude, me escapé y durante ésta semana he pasado desapercibido entre ellos. Me enteré de que te tenían preso aquí...! ¡Así que tracé un plan para escapar! ¡Siento haberte traicionado, amigo, pero el hambre pudo conmigo, ahora he querido recompensar mi error, salvándote!
-¡No pasa nada, te comprendo... yo quizás hubiera hecho lo mismo, si me hubieran puesto un manjar delante!
-¡...Kevin! ¡Esos hijos de puta, están experimentando con la pobre gente! ¡Y a los renegados los rajan de arriba a abajo y se los echan a los "beast", como alimento! ¡Tienen un montón de ellos, que antes eran personas! ¡Están aprovechando la contaminación, que los científicos recogieron del aire, después de la guerra, y están mutando a la gente de forma horrible! ¡Los "beast" no son nada más que el principio, creo que están buscando crear algo peor...!
-¿Pero que es lo que buscan, no son los dueños del mundo ya?
-¿Crees que el mundo es suficiente...? ¡Debéis salir de aquí! Toma -me dio un papel, bastante sucio y enrollado, de un color amarillento-, ésto es un plano de la ciudad...
-Ya escapé una vez de ella sé por dónde ir...
-No -comenzó a toser sangre-. No, las alcantarillas, ya no existen... lo he comprobado. ¡Escúchame, debes irte lo más lejos posible! ¡Quieren tú...! -los ojos se le pusieron blancos y su respiración comenzó a reducir.
-¡John! ¡JOHN! ¡Aguanta amigo!
-¡Kevin...! ¡Déjalo! -dijo Alicia consciente de lo que pasaba.
Miré a Alicia y luego a John. Había muerto, su cuerpo no había resistido su última transformación.
-¡Descansa en paz, amigo! -Alicia apoyó su mano en mi hombro, sentí su calor, que hacía tiempo no había sentido.
-Kevin... si éste John era un clon, ¿cómo conservaba los recuerdos del John original? -mi cara de confusión le valió como respuesta a Alicia.
Entonces mi mirada se situó sobre unas cajas que había destrozado John, de ellas salían un montón de armas de fuego y munición. Me levanté, me acerqué a la caja y me armé hasta los dientes. Cogí un arma y se la pasé a Alicia, ella me dedicó una sonrisa, mientras cogía más armas y municiones. Luego cogí una mochila que había por allí, y la llené de comida y agua.
Nos esperaba una batalla muy cruenta...
Continuará
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