lunes, 4 de agosto de 2008

¡Que mierda es crecer!

Cuando eres un mísero moco sin dientes y te da por pensar en lo "guay" que tiene que ser hacerse mayor, te sientes feliz y a la vez impotente, porque aun te queda mucho por vivir y por ver, para crecer unos centimetros y llegar a "ser mayor". En esos momentos de niñez, de inmadurez, de "me importa un rábano las consecuencias de lo que hago", no nos damos cuenta de lo mucho que vamos a echar de menos, esa época, cuando nos hagamos adultos.

Pensamos también, que ser un crio es una mierda, que los adultos tienen toda la libertad del mundo, que hacen lo que quieren cuando quieren, y que ser adulto es lo mejor. Pero llegamos a esa conclusión porque realmente nunca hemos pasado por la edad adulta (o simplemente porque no pensamos) La cuestión es que, te llevas toda la niñez esperando crecer y cuando pasa, te vas dando cuenta de que es una pesadilla, y entre más mayor aun es peor...

El rollo ahora es ser mayor. Solo te encuentras con responsabilidades por todas partes, problemas cada vez más graves, que se te vienen grande, no estas preparado para nada, no tienes nada de libertad, tienes que seguir reglas, te salen pelos hasta en el culo, es un coñazo tremendo tenerse que afeitar todas las semanas (y cuando chico lo que más deseaba es tener barba) Te empieza a gustar el sexo femenino (o masculino), esto es lo único bueno xD Aunque solo acarrea también problemas.... En fin un sin fin de cosas, y ésto es solo el principio de tu vida, ya que a medida que envejezas será aun peor. Te acomplejarás, se te caerá el pelo, te pondrás cano, te saldrá arrugas, te verás feo, serás menos ágil, te entraran enfermedades, tus organos cansados empezarán a fallar...

Joe, con lo divertido que era levantarse todas las mañanas, sin saber siquiera en que aventura te ibas a embarcar ese día, ignorando los problemas de la vida, haciendo gaberradas a algún vecino cascarrabias, aguantando las broncas de tu madre xD... pffff! Los días se hacían más largos, cualquier cosa te entretenía, cualquier cosa te hacía reir... ¡Que feliz ignorancia!

No hay comentarios: